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"EL 8 DE MARZO NOS RECUERDA QUE AÚN EXISTEN GRANDES DIFERENCIAS ENTRE HOMBRE Y MUJERES"

Flori Sánchez y Marisa Ruiz Moyano son las dos agentes de la oficina de igualdad de mancomunidad de la serena que desde hace casi una década velan por el bienestar de las mujeres y luchan a diario contra la violencia de género.

La violencia de género es una lacra social que, lejos de disminuir con el paso de los años, aumenta y lo hace a través de formas más variadas. Un problema que afecta a la sociedad y que termina con la vida de numerosas mujeres al año, además del daño físico y psicológico que genera en otras muchas.

La oficina de la igualdad de mancomunidad de la Serena se centra en tratar esta problemática e intentar ofrecer soluciones a las personas que lo sufren. Con motivo del día 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, Hoy Castuera ha hablado con Flori Sánchez y Marisa Ruiz-Mollano, las dos agentes encargadas de que este servicio funcione desde su puesta en marcha en 2008. El centro de Castuera forma parte de la de la red extremeña de atención a mujeres víctimas de violencia de género. Dicha red, explican, la conforman además expertos en otros ámbitos y siempre en colaboración con las instituciones públicas que lo sustentan.

Su labor se centra en varios focos de actuación. En un primer lugar, la atención temprana en los colegios. “Donde ponemos en prácticas campañas de sensibilización en el reparto de tareas y el respeto “. Explican que es esta etapa en la que es necesario incidir y educar en conductas igualitarias, “puesto que las actitudes de desigualdad se van generando desde pequeños”. Por otro lado, explican que también tratan a través de charlas y talleres el bulling y el ciber bulling, es decir, el acoso en las redes sociales, muy presente actualmente en los centros educativos. Además de los trastornos alimenticios en colaboración con el programa de ciudades saludables también de mancomunidad.

Asimismo, también ejercen una labor muy importante en los centros de enseñanza secundaria. “En la adolescencia es cuando se empiezan a desarrollar esos comportamientos machistas en las primeras relaciones entre jóvenes”. La inclusión de las redes sociales en la sociedad ha aumentado y favorecido ese control que muchos chicos ejercen sobre sus parejas. “El problema de verdad comienza cuando esas chicas consideran normal el hecho de cogerle el móvil o aislarlas de amigos y familiares. Estas actitudes por desgracia las vemos a diario en los institutos cuando vamos a impartir las charlas”, explican. Su labor se centra en detectar estos problemas de género e intentar ayudar a la víctima a salir de esa situación. “Nuestro objetivo es fomentar las relaciones sanas, por eso nos volcamos con campañas principalmente en estos sectores de edad puesto que es cuando se dan los primeros casos de violencia de género. Intentamos alertar de ciertos signos que determinan una relación de control y dominio para que se ponga fin cuanto antes”, informan.

Las asociaciones de mujeres es otro de los colectivos con las que las agentes de igualdad ejercen gran parte de su trabajo. “Intentamos dinamizar el tejido asociativo con actividades frecuentes. La mayoría de talleres que hacemos los municipios de la comarca se realizan en colaboración con estas agrupaciones”. En este punto, informan que a través de estas asociaciones se creó COMUSER, el Consejo de la Mujer de La Serena en 2012, “a través del cual hacemos actividades de sensibilización como talleres de risoterapia, maquillaje, relajación, alfabetización tecnológica o el que hicimos de zumba el 25 de noviembre”.

Marisa y Flori también destacan la colaboración esencial de los centros de salud que ofrecen ayuda psicológica y sanitaria y de los ayuntamientos que respaldan cada una de las actividades mancomunadas acogidas a este servicio. Otro de los sectores primordiales en su trabajo son las fuerzas de seguridad del Estado que velan por la protección de las mujeres afectadas en todo momento. “Son los encargados de hacer un seguimiento de las órdenes de protección”, continúan. “Tanto la policía local como la guardia civil garantizan la seguridad de las mujeres cuando necesitan ayuda o se encuentran en una situación de peligro”. Informan que muchas víctimas tras haber denunciado a su ex pareja tienen un teléfono de ayuda, que incluye un botón del pánico, en el caso de que éste incumpla las órdenes de alejamiento dictadas por el juez, los agentes acuden de forma inmediata a su llamada.

En relación con este colectivo, comentan que trabajan conjuntamente para convocar una mesa territorial de violencia de género, junto con el IMEX, las delegaciones de gobierno, los servicios sociales, el ámbito de la salud, el educativo, las instituciones políticas y los puntos de atención primaria. “Éste se presenta como un punto de encuentro para coordinar la prevención de la violencia de género. En materia municipal, Castuera ha sido la primera población en reivindicar la celebración de mesas a nivel local para abordar esta temática de manera más cercana con casos concretos y valorar su seguimiento”.

Ambas trabajadoras alertan de un hecho preocupante que se da en la actualidad. “Cada año aumentan las denuncias por violencia de género y en personas más jóvenes. Con la existencia de las redes sociales se ha generado otra forma de machismo en las nuevas generaciones, en las que lejos de haber evolucionado el pensamiento se han experimentado conductas más retrógradas por parte de los chicos respecto a este tema que hace unos años”, explican.

Su trabajo lo realizan de manera incansable durante todo el año, pero destacan dos fechas concretas en las que hay un gran despliegue de campañas y actividades en centros, asociaciones e instituciones. “El recién pasado 8 de marzo mandamos a los colegios folios morados para que los niños hicieran un mural con frases que fomenten la igualdad entre hombres y mujeres. Además hemos puesto en marcha por quinto año consecutivo el concurso de tarjetas de ‘el padre igualitario’, para que los más pequeños trabajen la sensibilización en el reparto de taras”. A su vez, ese mismo día se celebraron las II Jornadas de salud y mujer en Higuera. Respecto al 25 de noviembre, realizan cada año actividades simultáneas en varios municipios de la comarca, “el pasado año tocó el taller de zumba”.

De igual manera durante todo el año realizan actividades constantes en centro educativos y asociaciones con el objetivo de recordar que su labor. “Intentamos que tanto jóvenes como mayores sepan que hay una salida a cualquier conflicto de violencia de género y que nosotras estamos aquí para ayudarlas. En algunas ocasiones, si no quieren denunciar desde aquí le gestionamos la ayuda psicológica y demás cuidados o atenciones que pueda necesitar”, sentencian. “El hecho de haber estado las mismas desde el comienzo hace que la gente ya nos considere un referente y acuda a nosotros con más confianza”

Asimismo confiesan que ha sido un trabajo duro, “pero que merece la pena cada día por la labor que podamos hacer por y para las mujeres”. En cuanto al futuro advierten que el 8 de marzo no debería considerarse una conmemoración. “Nos recuerda que aún existen grandes diferencias sociales y laborales entre hombres y mujeres. El día que terminemos con esta desigualdad es cuando realmente deberíamos celebrarlo”, concluyen.