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El Festival Flamenco de la peña 'Manzanito de Castuera' repite éxito un año más
Aficionados y peñistas disfrutaron del XXVI Festival Flamenco de Verano celebrado el pasado Sábado, 24 de Agosto, en la 'Casta Municipal' del ferial de Castuera.
El Festival Flamenco de verano de la peña 'Manzanito de Castuera' volvió a contar un año más con figuras consagradas del flamenco, como Miguel de Tena, que le imprimen a la velada un carácter único y diferenciador. Además, en esta ocasión, el evento se vio reforzado por la presencia de dos cantaoras, la onubense de Calañas, Sonia León, y la extremeña de Siruela, Virginia González. El toque corrió a cargo del guitarrista cordobés de Puente Genil, Antonio Cáceres.
El presidente de la peña 'Manzanito de Castuera', Nemesio Ruiz 'El de la Mandila', fue el encargado de presentar una velada que resulto variada y completa, y que se prolongó durante casi cuatro horas
La joven cantaora extremeña, Virginia González, fue la primera en subir al escenario para interpretar con notable acierto los palos más clásicos del flamenco, arrancando así los primeros aplausos del público. Esto solo era el comienzo de un festival que presagiaba otra gran noche flamenca para los numerosos aficionados al cante que se dieron cita en la Caseta Municipal, entre los que se encontraban el alcalde de la localidad, Francisco Martos y los concejales, Ángel Morillo y Piedad Roso.
La noche flamenca comenzó subir de temperatura con la actuación de Sonia León, quien ofreció un recital en el que destacaron los cantes de Huelva y por fandangos, demostrando que venía fuerte y además dejando constancia de lo a gusto que se encontraba en Castuera y de lo cercana que se sintió con el público, al que le dedicó una serie de fandangos cantados en pie y sin micrófonos.
Para finalizar y como broche de oro a este festival subió al escenario Miguel de Tena. Era la actuación más esperada de la noche y el cantaor de Ruecas cumplió con creces. En plenitud de facultades y con una voz verdaderamente torrencial, Miguel de Tena cantó con su oficio habitual cautivando de nuevo al público con su enorme calidad. Como en anteriores comparecencias en la localidad, Miguel de Tena demostró su talento sobre las tablas, interpretando de manera ortodoxa y tradicional soleas, alegrías, tangos o tientos, en un generoso repertorio que remató, como en él es habitual, con una serie de fandangos cantados en pie y a viva voz ante un público que agradeció y premió su actuación con una gran ovación.
Por otra parte, cabe destacar la magnífica guitarra del cordobés de Puente Genil, Antonio Cáceres, que se acopló perfectamente a los cantes para crear un precioso equilibrio entre cante y toque.
En definitiva, fue una extraordinaria velada flamenca que quedará en el recuerdo de peñistas y aficionados como una las mejores de todas las celebradas en la localidad.